22/1/09


Y para aquel entonces
nuestras legítimas sombras
con una mirada triste y sordase encontrarán en la niebla torpes.

Emanará fervor de mil soles
y nos mojará una lluvia tonta
de esas que solo se mofan
para hidratar las veladas de joven.

El minuto durará un siglo
en la histérica nada,
juntos tu y yo cautivos.

Y así como vislumbraba,
te veré alejarte hacia el infinito,
mientras, mi alma se clava en la nada.

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